Nuestro apartamento en Nueva York

Fachada de nuestro apartamento en Midtown Manhattan
Fachada de nuestro apartamento en Midtown Manhattan

Antes de comenzar el viaje, en las entradas del blog dedicadas al planning, dedicamos una de ellas a la búsqueda del alojamiento, donde tratábamos las alternativas que barajamos en su día. Pero claro, antes del viaje no podíamos tener opinión sobre el apartamento que elegimos, ni la web donde lo contratamos. Esta semana Lucas nos preguntaba nuestra opinión. Intentaremos ir por partes.

Apartamento u hotel.
Aquí no hay lugar a dudas. Consideramos la elección un acierto. Como íbamos 6, hubiéramos necesitado 3 habitaciones dobles en un hotel; y por aproximadamente el mismo precio de una de las habitaciones, conseguimos el apartamento para todos; la diferencia es considerable. Por otro lado está la convivencia; en un hotel es más difícil estar juntos (no hay salón, cocina, etc), parece que cuando llegas al hotel, cada uno se va a su habitación y no te ves hasta el día siguiente. En el apartamento, pudimos comer/cenar en casa, estar en el comedor preparando el planning del día siguiente, etc; vamos como en casa.

Agencia / web.
En nuestro post anterior dejábamos enlaces a varias páginas de alquiler de apartamentos. Finalmente nos decidimos por FeelNYC porque parecía que tenían precios más ajustados; en varias ocasiones vimos el mismo apartamento en varias webs, y FeelNYC era la más barata. Las condiciones de todas las páginas eran parecidas; salvo alguna excepción, todas se quedan con alguna parte del precio total a cambio de «supervisar» la operación. Nuestra experiencia con FeelNYC es positiva, la comunicación con ellos (por e-mail) fue buena en todo momento, y no tuvimos ningún problema. Hacen de intermediarios entre el casero y el arrendatario, con que después de pagar el porcentaje de reserva nos pusieron en contacto con el casero, para ver las formas de pago de la cantidad restante, y cómo hacer la entrega de llaves a nuestra llegada. Fue todo muy bien.

Elección del apartamento.
Este punto puede ser el más difícil dada la gran oferta de apartamentos que hay en toda la ciudad; y en cuanto a nuestras elecciones, puede ser la única que tengamos dudas. Nos quedan dudas no porque el apartamento estuviera mal, sino porque no conocemos el estado habitual de los apartamentos en Nueva York, aunque por comentarios leídos, parece que nuestros «peros» parecen comunes en toda la ciudad. Estos inconvenientes que vimos eran sobre la calefacción (las tuberías hacían ruido al enfriarse/calentarse) y el aislamiento (digamos que las ventanas no eran herméticas), aparte de la ausencia de persianas o cortinas opacas (pero esto fuera de España es muy normal). Lo mejor sin duda era el emplazamiento, en la 9th Ave con la 53th St; teníamos cerca el metro, se podía ir andando a Times Square sin tener el bullicio y agobio de gente, y nuestra calle estaba llena de restaurantes, delis y tiendas.

En resumen, una experiencia muy positiva, que repetiríamos sin dudarlo. A ver cuando tenemos la oportunidad :-).


Imagen | dnotivol en Flickr
Enlaces | FeelNYC
En Borrajas.es | USA: Buscando alojamiento en Nueva York

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Cocktail de borrajas (VI)

Shmokin Cocktail!Como cada domingo, aquí llega el cóctel de borrajas de la semana:

  • Una semana más, tenemos nuevas caractarísticas de Google; esta vez Google Images, que añade la posibilidad de subir tu imagen, y el buscador te muestra resultados en base a ella. Nos lo explican en Genbeta.
  • Siguiendo con las novedades, una de Ubuntu; en Linux Hispano nos cuentan que Canonical piensa eliminar Synaptic de la próxima versión de Ubuntu, la 11.10, Oneiric Ocelot.
  • En Muy Linux esta semana hacían una reflexión sobre el software libre y el software privativo en GNU/Linux, con encuesta incluida.
  • Sobre televisión, no podíamos dejar de nombrar la pérdida de Peter Falk, el eterno teniente Colombo; podemos leer su obituario en El País.
  • Y para terminar, una foto que dio la vuelta al mundo, una pareja besándose en el suelo durante los disturbios en Vancouver tras la final de la copa de Hockey sobre hielo. En Yahoo Sports nos muestran la foto y nos desvelan la historia (en inglés).

Imagen | Aoife Mac en Flickr
Borrajas.es | Cocktail de borrajas

Tocando el piano en las calles de NYC

Sing for Hope Pop-Up PianoLa gente que visite Nueva York durante estos días peude encontrarse una sorpresa por la calle. Sí, la imagen que encabeza la entrada es real, gente tocando el piano por la calle.

La explicación es que la organización no gubernamental Sing for hope (canta por esperanza) ha repartido 88 pianos (de pared y de cola) por los cinco distritos de Nueva York. Estos pianos han sido donados a la organización, donde artistas los han restaurado y pintado para la causa. Y desde el pasado 18 de junio hasta el 2 de julio estarán disponibles para el que quiera mostrar su talento. Después de esa fecha, se retirarán para ser donados a escuelas, hospitales y organizaciones comunitarias de la ciudad.

La idea se basa en un concepto del artista británico Luke Jerram, que ya había colocado pianos en las calles de otras capitales como Londres, Sydney o Sao Paulo. La verdad, esto me recuerda a las «Cow Parades», las vacas decoradas que ya han visitado un montón de ciudades por todo el mundo.

Si queréis conocer dónde podéis encontrar uno de estos pianos, sólo hay que visitar la página web de la ONG: pianos.singforhope.org, donde tienen un mapa de Google Maps con los puntos donde están situados los 88 pianos.

Sing for Hope pop-up pianos


Imagen | Louis Armstrong House Museum y BKLYN guy en Flickr
Enlaces | Pop-up pianos – Sing for hope
Vía | Nueva York se llena de pianos, Pop-up pianos, el arte en las calles de Nueva York

Cocktail de borrajas (V)

Cocktails at Lee LoungeEn nuestra ración de cóctel de borrajas de esta semana volvemos a tener un poco de todo: internet, televisión, móviles y aviones…

  • Sí, móviles y aviones; en Engadget se hacen eco de un estudio que dice haber relacionado algunos accidentes aéreos con dispositivos electrónicos encendidos; y nosotros que pensábamos que era un mito…
  • En Bitelia, nos comentan una nueva funcionalidad de Google, en este caso para Gmail, que desde esta semana nos permite pegar imágenes desde el portapapeles al redactar nuestros correos electrónicos.
  • Girando hacia el GNU/Linux, la última filtración de las novedades que prepara Canonical, la nueva interfaz del Centro de Software de Ubuntu, muy vistoso según Genbeta.
  • Como noticia de televisión, un nuevo programa-reportaje que va a estrenar Cuatro, aprovechando el tirón de House: «Superdoctores«; lo hemos leído en ¡Vaya tele!
  • Y para terminar, no me he podido contener, la sensación semanal (¿y del mes?) de la televisión ¡y de la música!, Berto Romero y the Border Boys:


Imagen | Renée S. en Flickr
Borrajas.es | Cocktail de borrajas

 

Consejos USA: Metro de Washington

Metro de Washington DC
Metro de Washington DC

Comenzamos una minisección sobre el viaje a Washington y Nueva York, lo que los americanos llamarían «tips and tricks«, o sea, conesejos y trucos. Y empezamos con el transporte de la capital, en concreto del servicio de metro.

La red de metro en Washington no es tan amplia como en otras ciudades (léase Nueva York), pero sus tres líneas cumplen de sobra para unir el centro con los principales puntos a visitar. Por lo que hemos podido ver, es una red moderna, muy limpia y cuidada.

Pero vamos a centrarnos en las particularidades de su sistema de billetes. Lo más importante es que hay que guardar el billete durante el recorrido. En todos los medios de transporte es necesario guardarlo por si viene el revisor, pero en éste el billete nos abre el torno de salida del metro. Esto se debe a que no hay tarifa única para todos los viajes, el precio depende de la estación de origen y destino entre las que queramos movernos, y también de la hora del día en que hagamos el viaje.

Así dicho, puede parecer complicado comprar un billete de metro, pero no es así; vamos a ver los pasos:

  1. Cuando llegamos a la estación de metro, ir a las máquinas expendedoras (los trabajadores de los mostradores son sólo para información y control, no venden billetes). Debemos ir a las que indican «farecard«, que es como se llaman los billetes simples (sin abonos).
  2. Estas máquinas tienen unas tablas con los horarios, pues el precio va a depender si es hora punta o no. Tenemos entonces que ver el horario en el que queremos viajar, para ver el nombre del tramo horario.
  3. Una vez conocemos el tramo horario, en otra tabla más grande podemos consultar el precio de nuestro trayecto. En las máquinas de cada estación, están los listados de todas las estaciones de la red de metro, y para cada estación se indica el precio del trayecto en los distintos tramos horarios. Es pues, juntando el nombre de nuestra estación de destino, y nuestro tramo horario, cuando sabremos el precio final del trayecto.

Esto que puede parece complicado, acaba siendo más sencillo, ya que al final hay solo tres o cuatro precios distintos, en función del recorrido y de la hora. Pero… ¿y qué pasa si nos equivocamos de parada o cambiamos de idea a mitad de camino? No hay problema. Vemos las dos opciones:

  • Si el recorrido que hemos hecho es más barato que el que habíamos pagado, la parte sobrante nos queda guardada en la tarjeta. Podemos guardarla par el próximo viaje y recargarla con más dinero si fuera necesario.
  • Si el trayecto recorrido es más caro que el dinero de nustra tarjeta, el torno de salida no se abriría. En este caso, tenemos que utilizar otras máquinas que hay antes de la salida que sirven para eso, para pagar desfases entre tarjetas y trayectos. Pagamos la diferencia y ¡listo!
Tarjeta metro Washington, DC
Tarjeta metro Washington, DC

Queda por añadir, que se pueden hacer trasbordos durante el trayecto, y que es necesario usar un billete por persona. Podemos consultar el mapa interactivo de la web del WMATA (Autoridad de Tránsito del Área Metropolitana de Washington). Además, como comentamos en nuestro primer cocktail de borrajas, ya aparece en los mapas de Google maps; una ventaja, sin duda.


Imágenes | Colin Campbell y dnotivol en Flickr
Enlaces | WMATA (Autoridad de Tránsito del Área Metropolitana de Washington), WMATA – Planificador de viajes, WMATA – Mapa interactivo

«Embrujada» que no embruja…

EmbrujadaEmbrujada, película de 2005. Desde entonces, nada me llamaba a verla, pero las noches de los domingos, y la «película de la semana» de La 1, sin anuncios, es lo que tienen.

Una vez vista, leyendo alguna crítica profesional, dicen que sólo vale la pena por ver a Nicole Kidman. En mi caso, que le tengo bastante grima, es otro punto negativo. Pero si que estoy de acuerdo con estas críticas en el resto, y es que Embrujada no hechiza a nadie.

Se basa en una versión de la serie de los sesenta, en que Samantha es una bruja que trata de ocultar o deshacerse de sus poderes para llevar una vida más tranquila con su familia. Pero en lugar de hacer una versión al uso, han incluido el propio remake de la serie dentro del argumento de la película (este recurso es casi lo único de la película que me ha gustado). El resto, ridículas situaciones de comedia romántica sin gracia ni sustancia.

Si bien las películas anteriores dirigidas por Nora Ephron (Tienes un e-m@ilAlgo para recordar) no terminaron de gustarme, ésta se lleva la palma… Aparte de a Nicole Kidman (Moulin RougeLas horas), en Embrujada podemos ver a Will Ferrell (El reportero, Elf), que entre los gestos y los gritos parece estar todo el tiempo imitando a Jim Carrey (¿es que no les llegaba el presupuesto?). Lo que sí está claro, es que todo el mundo tiene que comer, y eso a veces lleva a actores como Shirley MacLaine o Michael Caine a intervenir en películas de este tipo.

Mi nota en FilmAffinity: 3 – Floja.


Fichas | FilmAffinity (3,5/10), IMDB (4,8/10)
Enlace | Embrujada (Bewitched)
(El copyright de las imágenes pertenece a sus respectivos autores y/o productoras/distribuidoras)

«TRON: Legacy», motos de luz y poco más

TRON: LegacyAntes de empezar con la review, he de reconocer que no he visto la primera parte, la Tron original. Pero sabiendo el halo de título de culto con el que se categoriza a la primera parte, había ganas de ver su secuela, eso sí, 28 años después: TRON: Legacy.

La historia comienza con el protagonista de la primera película, Kevin Flynn (Jeff Bridges), desaparecido, mientras que su hijo, Sam Flynn (Garrett Hedlund), que ya tiene 27 años y ha heredado la compañía de software, recibe una pista sobre su paradero. Al seguirla, se ve absorbido por el mundo cibernético que creara su padre, donde ha estado viviendo todo este tiempo. Con la ayuda de Quorra (Olivia Wilde), padre e hijo luchan por mantenerse con vida en este universo paralelo.

Como actores, ya decíamos que aparece Jeff Bridges (El gran Lebowski, Corazón rebelde) como ya hiciera en la primera parte, esta vez con un «clon» rejuvenecido (¿por ordenador?), y Garrett Hedlund, que quizá recordemos como Patroclo, el sobrino de Brad Pitt en Troya. Como compañía, en un papel bastante absurdo, podemos ver a Olivia Wilde, conocida como Trece en House.

Lo más positivo de la película son, sin lugar a dudas, todos los aspectos visuales, tanto efectos especiales, como lo impactantes de los trajes luminosos y escenarios oscuros dibujados por líneas limpias a base de neón. El sabor que deja es haber visto una partida del típico videojuego de la serpiente, con impresionantes motos de luz, pero alargado hasta las dos horas de duración por medio del clásico guión de la lucha del bien y el mal, sin mayor profundidad.

Mi nota en FilmAffinity: 5 – Pasable.


Fichas | FilmAffinity (5,8/10), IMDB (7,0/10)
Enlace | TRON: Legacy
(El copyright de las imágenes pertenece a sus respectivos autores y/o productoras/distribuidoras)